“MANCHA MÍNIMA, IDEA MÁXIMA”, PABLO AMARGO EN EL MUSEO ABC
21 mar. 2018
exposiciones
De las muchas disciplinas que ofrece el arte, la ilustración suele ser la gran olvidada. Quizás por la sensación de accesibilidad de esta técnica en contraste con otras especialidades más exigentes. Sin embargo, la ilustración se ha modernizado considerablemente y es una de las ramas artísticas en las que las herramientas digitales han llegado para quedarse.

Esta valoración de la ilustración ha cambiado en los últimos tiempos, lo que ha hecho surgir una nueva generación de jóvenes ilustradores. Además, la consideración de esta disciplina se ha fortalecido y no son pocos los premios que ahora se otorgan para estos creadores que antes se servían de lápiz y papel y ahora usan con cada vez más frecuencia el pincel digital.

Este es precisamente el caso de Pablo Amargo, ilustrador nacido en Oviedo que ha llevado sus obras más allá de nuestras fronteras y cuenta con un amplio reconocimiento internacional. Pablo cuenta en su haber con numerosas menciones y premios, como el Premio Nacional de Ilustración otorgado por el Ministerio de Cultura en 2004 hasta los más recientes concedidos por la New York Society of Illustrators en 2016 y 2017. Además, en 2016 obtuvo el Premio Gráfica, en reconocimiento a su contribución a la cultura visual española.

La obra de Pablo ha evolucionado en permanente conexión con el mundo editorial. Sus ilustraciones son un ejercicio consciente de simplificación y minimalismo, con un juego intencionado de comicidad y ocurrencia que hace honor a la máxima “menos es más”. Precisamente a este espíritu responde la exposición que hoy le dedica el Museo ABC de la Ilustración, con el título “Mancha mínima, idea máxima”, que recoge las obras originales de dos de sus series más recientes: “Cats are paradoxes” y “Casualidad”.

El blanco y negro, la línea desnuda y el juego de contrastes son elementos esenciales en la obra de Pablo. Esta búsqueda de los dobles sentidos visuales, de las paradojas sobre papel le ha llevado a ilustrar en varias ocasiones las portadas de The New York Times, The New Yorker, Jot Down Magazine o National Geographic, entre otros. Una buena oportunidad de conocer las propuestas de este consolidado dibujante.