Art Madrid'25 – ENTREVISTA CON EL ESCULTOR CUBANO GABRIEL RAÚL CISNEROS

Gabriel Raúl Cisneros

El joven escultor Gabriel Raúl Cisneros (1990, Las Tunas, Cuba), vive y trabaja en La Habana. El artista es discípulo del también escultor cubano José Villa Soberón desde hace más de un lustro, con quien ha realizado un número considerable de esculturas conmemorativas. Ha participado en disímiles exposiciones colectivas y personales, en Cuba y el extranjero. Su obra forma parte de colecciones en Panamá, México, Estados Unidos y Líbano. Obtuvo el Segundo Premio en Post-it 6, concurso de arte cubano para artistas emergentes.

Las esculturas de Cisneros desde su morfología intentan poner a prueba la naturaleza de la realidad, se nos muestran de forma inesperada y nos colocan en medio de una retorcida partida mental, que inevitablemente atrapa nuestra atención y nuestra empatía. “Creo que entre la percepción y la reflexión es donde encuentra su lugar estas obras, está ahí para decirnos algo sobre nuestra mirada, sobre la manera en la que esperamos que se nos muestre la realidad.”

La serie que el artista presenta en Art Madrid lleva por título “El ocio y la embestida”. En esta serie, el pedestal tiene como misión no solo elevar la obra del suelo y subrayar su carácter erecto, sino también expresar la idea de que la obra es un volumen pesado, sólido y macizo, capaz de sobrevivir al paso del tiempo. Pero el pedestal es también el altar sobre el que se glosan las hazañas de los héroes o se recuerdan los hechos que originaron la elevación: en esta ara se venera la memoria colectiva de los ciudadanos. Pero corren tiempos marcados por el fin de los mitos que generaron estas obras, y la pérdida del pedestal de la escultura contemporánea refleja la ausencia de la voluntad conmemorativa que caracteriza a la escultura tradicional.


Entrevista:


Háblanos sobre tu proceso creativo

Por lo general, el material que utilizo en mis obras es resina de poliéster, es un material que me interesa mucho porque es muy versátil, ofrece muchas posibilidades y se adecúa perfectamente a mi proceso de trabajo. Es un proceso de trabajo que por lo general se inicia con una idea. Uno va caminando por la calle y se le van ocurriendo cosas que más tarde se van madurando en el interior, sobre la mesa de trabajo.

Mis esculturas llevan un trabajo previo de dibujo. Una vez tengo la idea de la obra, hago un trabajo con un modelo, para visualizar mejor la postura, y auxiliarme en la fotografía a la hora de construir la pieza, de ahí pasamos al trabajo de taller donde se comienza con un armazón de metal que va a soportar el material sobre el que se modela la obra, y es la parte creativa del proceso, ahí es donde la escultura toma su forma y adquiere todos los detalles, es ahí cuando le doy la forma final. Luego se involucran varios técnicos que hacen moldes de yeso de la pieza y se lamina la resina, se rompe el molde y sale la figura en resina, que se retoca y ya luego pasamos al montaje y emplazamiento.

¿En qué estás trabajando actualmente?

Actualmente me encuentro trabajando en una serie de esculturas que toman como referencia la escultura conmemorativa de finales del siglo XIX e inicios del XX. Lo que estoy haciendo es tomar la escultura como objeto y descontextualizando, es decir, sacándolo de su emplazamiento habitual, el parque, el pedestal, el entorno citadino y llevándolo a la galería.

Me interesa como la escultura, este tipo específico de escultura, se carga de un contenido distinto, al contenido primigenio, al interior del espacio galerístico donde por supuesto cambiándole la postura, la situación se resignifica. Me gusta mucho la manera en la que el espacio donde se emplaza la escultura condiciona el objeto, la escultura en el pedestal, en el parque, tiene un significado y un carácter distinto, al que puede tener ese mismo objeto al interior de la galería en otra situación diferente a la que normalmente nos lo encontramos. Me interesa mucho como la mirada del espectador en torno a un mismo objeto puede cambiar dependiendo del espacio que lo rodea.


Participas por primera vez en la feria, ¿Qué esperas de Art Madrid?

La posibilidad de participar en Art Madrid es para mi una puerta que se abre al público europeo. Es mi primera vez participando en la feria, la primera vez que mis obras van a estar en España y en Europa. Por supuesto es algo que me entusiasma, ver cómo funcionan las piezas en un contexto ajeno al contexto nacional cubano.

Gabriel Raúl Cisneros

Ocio, 2021

Resina

15 x 15cm

Sueles trabajar con escultura en mediano o gran formato. ¿Es posible que con estos formatos consigas una conexión más real y cercana con el espectador?

Por lo general trabajo esculturas de mediano y gran formato, pero en esta ocasión, me interesa específicamente la escultura de pequeño formato, en este caso maquetas de obras que posteriormente realizaré a una mayor escala. Por el hecho de que en este formato, puedo ensayar la situación en la que quiero colocar al objeto escultórico. Como es un formato más pequeño me permite, sin arriesgar demasiado, visibilizar todas las posibilidades que me brinda ese objeto, y colocándolo en diferentes situaciones y posiciones van desprendiéndose significados.

Gabriel Raúl Cisneros participa por primera vez en Art Madrid con la galería Collage Habana, junto a los artistas Frank González, Luis Enrique Camejo y Yohy Suárez.



Hay lugares donde el arte respira distinto, donde cada obra tiene el espacio para hablar al oído del espectador. Art Madrid, se ha convertido, edición tras edición, en un encuentro esperado para el arte contemporáneo; una cita donde lo novedoso se entrelaza con la cercanía entre el público, los artistas y los galeristas, rompiendo esas “barreras invisibles” que caracterizan a la mayoría de macro eventos de esta naturaleza. Este 2025, celebramos nuestra 20ª edición adscritos a las motivaciones que desde siempre han definido a Art Madrid: Una propuesta cercana al público y a la realidad del mundo del arte, consciente de los retos futuros y del impacto positivo de eventos como el nuestro, que oxigenan y dinamitan muchas veces la endogamia que suele respirarse en el sector.


Milija Cpajak Thorn. Escultura en bronce. 2021.


A menudo se piensa que el éxito de una feria se mide en metros cuadrados. Cuando realmente el valor se encuentra en la motivación del público a volver año tras año a recorrerla y recomendarla. En nuestro caso, ser una feria "pequeña" es una declaración de principios. Aquí no hay prisa, ni multitud que ahogue las conversaciones.

En Art Madrid, las galerías, los artistas y los coleccionistas tienen tiempo para encontrarse, para desentrañar las historias detrás de las obras. Un lugar donde la cercanía del diálogo toma protagonismo frente a la grandilocuencia de los números. A lo largo de estos veinte años, hemos visto crecer a galerías que comenzaron esta aventura con nosotros, que han compartido y forjado su camino en ese mismo espíritu de cercanía y autenticidad. Al mismo tiempo, cada edición se enriquece con la incorporación de nuevos proyectos y visiones que inyectan aire fresco y amplían nuestras perspectivas artísticas.


Veljko Vuckovic. Suspended State. Óleo sobre lienzo. 2024.


El 2025 nos trae una selección de artistas que están dibujando el futuro del arte. De la mano de las treinta y cuatro galerías que participan en esta edición de Art Madrid, descubriremos a artistas cuya pasión por la expresión visual redefine los límites entre la abstracción y la figuración; propuestas audaces que exploran la textura, el color y el simbolismo de “otras” narrativas visuales; nuevas voces y miradas que se enfrentan a los desafíos de la creación en un mundo globalizado. Esta riqueza de perspectivas permite que los visitantes asistan a un diálogo constante entre la creación contemporánea y las tensiones que la atraviesan.

Un ejemplo claro de cómo los artistas contemporáneos están tejiendo hilos entre el pasado y el presente, reconfigurando así, nuestra comprensión del arte como una práctica dinámica y en constante diálogo con la historia. En este contexto los artistas desafían las convenciones del lenguaje visual y nos invitan a repensar los significados, las texturas y los símbolos que impregnan nuestras percepciones.

La feria ha sabido mantenerse fiel a su identidad de ser un evento cercano, de dimensiones contenidas pero de gran impacto, que le ha permitido ofrecer una experiencia única y personalizada a todos los involucrados. La pregunta que planteamos es clara: ¿cómo se entiende el arte contemporáneo en el siglo XXI? ¿Cómo puede una feria no solo ser un lugar de compra-venta, sino también un espacio de debate, de crítica, de descubrimiento? Y, sobre todo, ¿qué significa celebrar veinte años de arte contemporáneo en un mundo que se transforma a una velocidad vertiginosa?


Iyán Castaño. Corrientes circulares. Técnica mixta. 2024.


En este 2025, Art Madrid se presenta como un llamado a la acción: a detenernos y reflexionar sobre el papel que el arte juega en nuestras vidas y en la sociedad. En lugar de ser una respuesta rápida a la dinámica del mercado, la feria ofrece una pausa, un espacio de reflexión en el que la obra de arte puede dialogar con el espectador de manera más profunda y significativa. Este enfoque no solo es necesario, sino que se convierte en un acto de resistencia frente a la inmediatez y la superficialidad que a menudo caracteriza al consumo de arte en la era digital.

En una época en la que la aceleración del mercado y las tendencias consumistas definen la creación y la exposición de las obras, Art Madrid ha mantenido su fidelidad a un modelo que apuesta por la reflexión pausada, el encuentro personal y el diálogo profundo. Esta crítica a la aceleración es particularmente pertinente en un momento histórico en el que las plataformas digitales, los algoritmos y la globalización están redefiniendo nuestras interacciones con la cultura.


Joana Gancho. ST. Óleo sobre tela. 2024.


En esta edición nos enfrentamos al reto de equilibrar la necesidad de ser relevante en un mercado globalizado con la preservación de la autenticidad y la creatividad. En este sentido, hemos logrado encontrar un punto intermedio, donde la calidad de la propuesta artística se prioriza por encima de la masificación de los eventos. Este principio es fundamental para entender cómo la feria ha logrado, durante dos décadas, convertirse en un escaparate internacional que no pierde de vista su esencia local y su conexión con la comunidad artística de Madrid.

La presencia de disciplinas como la pintura, la escultura, la fotografía y la videocreación evidencia la pluralidad de enfoques que define a Art Madrid. La diversidad de lenguajes artísticos ofrece al público una visión completa y diversificada del panorama del arte contemporáneo actual, poniendo de manifiesto el poder del arte para transformar la percepción de los espacios urbanos, integrando la tecnología en el proceso creativo para reconfigurar la relación entre el espectador, el arte y el contexto que lo acoge.

Richard García. Me peleo con las bestias de mi propia fantasía. Acrílico, tintas, spray y rotulador sobre tabla. 2024.

Art Madrid regresa en esta edición celebrando sus veinte años de arte contemporáneo; comprometida con su causa de seguir siendo espacio abierto para galerías y artistas que buscan diferenciarse en un mundo cada vez más fragmentado y saturado de imágenes. Por eso procuramos que las propuestas expositivas de las galerías resuenen en el público y nos ocupamos de apoyar esta experiencia proponiendo otras formas de relacionarse con el arte contemporáneo, abordando cuestiones complejas como el cambio climático, la identidad, la memoria colectiva y la política global. Este 2025, las obras que se presentarán en Art Madrid reflejarán, sin duda, las inquietudes y preocupaciones más urgentes de nuestro tiempo.