Art Madrid'25 – ENTREVISTA A SAMUEL SALCEDO. REALISMO Y SENTIDO DEL HUMOR CON 3 PUNTS GALERIA

”En el aluminio o el mismo epoxi negro con el que trabajo, el espectador se refleja y lee según su estado de ánimo lo que está pasando.”

Samuel Salcedo, creador de expresivos personajes irónicos y vulnerables, presenta en Art Madrid con la galería 3 Punts de Barcelona, una selección de obras de su trabajo más reciente. El escultor catalán ha ejecutado estas piezas experimentando con nuevos materiales como el hierro colado o la arena de fundición.

Samuel Salcedo participa asiduamente en exposiciones individuales con 3 Punts Galeria, 100 Kubik Gallery (Colonia) o con Robert Drees en Hannover. Su obra ha estado presente en ferias de arte contemporáneo como Art Madrid, Swab, Frankfurt Art Fair o Art London, entre otras.

Samuel Salcedo

Black Mirrors Series, 2019

Resina epoxi

70 x 70cm

Samuel Salcedo

Pinball Wizard 1, 2019

Aluminio

95 x 95cm

La galería 3 Punts vuelve a apostar un año más por tu trabajo, ¿qué nuevas piezas podremos ver en esta edición de Art Madrid?

Me hace mucha ilusión llevar tres esculturas que he hecho en hierro colado, un material con el que he empezado a trabajar recientemente. Son tres piezas, tres cabezas que van a ir colocadas directamente sobre el suelo, piezas muy pesadas con un material muy bonito, que tiene memoria. En la superficie de éste material a la intemperie se queda la marca de la oxidación, y esto va ligado a nueve máscaras que van a ir colocadas en la pared, trabajadas bajo la misma idea. Estas 9 piezas están hechas con arena de fundición reciclada, arena que antes se utilizaba para hacer moldes en la fundición y que se ha ido quemando y se ha reutilizado después de haber sido campanas, grifos, otras esculturas… Entonces, este material que “ya ha hecho su trabajo”, yo lo reciclo, lo mezclo y lo aplico a la superficie de los rostros, en la piel de éstos.

Aunque solo fuese por curiosidad, ¿te has planteado experimentar con otras técnicas artísticas como por ejemplo la pintura?

Cuando empecé a exponer en Art Madrid, al principio, exponía pintura solo, y poco a poco he ido cambiando. Me gusta la pintura, es un lenguaje que de hecho me era más natural en un principio. Ahora llevo alrededor de 10 o 12 años trabajando prácticamente con escultura en exclusiva, pero también pinto. Lo que pasa es que la pintura es un lenguaje un poco más “cruel”, y el hecho de estar trabajando a un ritmo muy intenso no me permite realizar muchas. Algunas las hago, de hecho tengo muchas empezadas pero no llegamos para esta edición.

Samuel Salcedo

Toy Land - Mirror Mirror, 2019

Resina poliuretano policromada

27 x 10cm

Tus cabezas en resina de epoxi o en bronce tienen diferentes expresiones, la mayoría pasivas o con gestos de enfado, ¿qué quieres transmitir con estas esculturas aparentemente individualistas?

Intento que los rostros no sean muy extremos, que puedas empatizar con ellos, que no desagraden ni generen rechazo. Si que es verdad que algunos tienen una expresiones ambivalentes, según la persona que las mire puede interpretar que hay un gesto de placer o disgusto en el mismo rostro. Me gusta mucho que la persona que vea mis piezas se pueda reflejar, de hecho en muchas de mis esculturas trabajo con un material que refleja la luz o incluso la imagen. En el aluminio o el mismo epoxi negro con el que trabajo el espectador se refleja y lee según su estado de ánimo lo que está pasando. Al final es básicamente esto, como un espejo donde la gente ve cosas y al final el rostro humano con sus diferentes expresiones es una fórmula de comunicación, igual que lo es hablar o mover las manos. Con esto intento enganchar a la persona que está viendo mis piezas.

Tus personajes se mueven entre lo real y lo fantasioso, y todos ellos muestran ciertas imperfecciones, ¿tiene esto que ver con la realidad social y política del momento?

A veces haces cosas por intuición o sin pensarlas demasiado. En este caso el hecho de escoger una belleza más idealizada, una belleza más natural o unos cuerpos más naturales, no tienen una razón muy clara. Es verdad que me lo han comentado, sobre todo cuando represento mujeres, no es tipo de belleza al uso, son bellezas normales. Se ve que hay una corriente para normalizar esta representación dentro de mujeres que en realidad tienen cuerpo, igual que los hombres. Nadie es perfecto. Recuerdo que el año pasado un grupo de chicas de la Universidad de Bellas Artes me comentó que se identificaban mucho con esta corriente y me pareció muy bonito el hecho de que a veces puedas enganchar todo esto, el hecho de no idealizar. Hay un trasfondo social evidentemente, yo escojo no buscar estereotipos, sino intento buscar la normalidad tal cual somos, que para algo vivimos todos en el mismo lugar.

Samuel Salcedo en su estudio de Barcelona

Como artista, ¿con qué te sientes comprometido?

Cuando trabajas tomas decisiones, y es cierto que hay artistas que tienen un compromiso social mucho más intenso que el mío, pero yo a nivel individual si lo tengo. Pienso que dentro de lo que pueda controlar yo en mi trabajo tengo que intentar ser sincero con lo que hago. Tengo niños pequeños e intento explicarles, sobre todo a mi hija, la igualdad entre géneros, no buscar estereotipos…

Cuando trabajo con la representación de hombre y mujeres, en este caso, es lo que intento buscar, que haya cierta dignidad en la mujer y sobre todo intento que mi lenguaje sea entendible. No pretendo crear un trabajo elitista, porque me parece muy injusto el hecho de intentar no hacerte entender. Si mi familia o mis amigos no entendiesen mi trabajo me estaría equivocando en algo. El hecho de tener una actitud generosa con la gente que ve tu trabajo también estaría dentro de esta idea.

¿Consideras que hoy en día es difícil destacar como artista? ¿Es en la originalidad de la técnica y el estilo donde está el secreto del triunfo como artista en el mercado del arte actual?

Triunfar es muy relativo. Yo cuando estudiaba pensaba: “hombre, triunfar será que pueda vivir de esto…”, pero claro, vas cambiando tus expectativas. Al final es una pelea, tiene un punto injusto, porque mucha gente piensa, que aún teniendo talento no consiguen tirar para adelante, y también hay algo de justicia por ejemplo en mi caso y en el de gente que conozco que es brillante y que vamos tirando. Si viviésemos en Nueva York, tendríamos la dimensión del éxito muy diferente al que tenemos por ejemplo en Barcelona. Yo no me voy a quejar, sería muy injusto, pero también requiere de un esfuerzo importante, la exigencia que requiere este trabajo y la renuncia hay que tenerlas claras. Depende mucho además de factores externos que son difíciles de controlar, pero bueno, yo siempre que he creído que hacía algo que estaba bien me ha funcionado.

3 Punts Galeria, expondrá en Art Madrid las últimas creaciones de los artistas: Alejandro Monge, Efraïn Rodríguez, FAILE, Gerard Mas, Kiko Miyares, Ramon Surinyac, Richard Stipl y Santiago Picatoste

Hay lugares donde el arte respira distinto, donde cada obra tiene el espacio para hablar al oído del espectador. Art Madrid, se ha convertido, edición tras edición, en un encuentro esperado para el arte contemporáneo; una cita donde lo novedoso se entrelaza con la cercanía entre el público, los artistas y los galeristas, rompiendo esas “barreras invisibles” que caracterizan a la mayoría de macro eventos de esta naturaleza. Este 2025, celebramos nuestra 20ª edición adscritos a las motivaciones que desde siempre han definido a Art Madrid: Una propuesta cercana al público y a la realidad del mundo del arte, consciente de los retos futuros y del impacto positivo de eventos como el nuestro, que oxigenan y dinamitan muchas veces la endogamia que suele respirarse en el sector.


Milija Cpajak Thorn. Escultura en bronce. 2021.


A menudo se piensa que el éxito de una feria se mide en metros cuadrados. Cuando realmente el valor se encuentra en la motivación del público a volver año tras año a recorrerla y recomendarla. En nuestro caso, ser una feria "pequeña" es una declaración de principios. Aquí no hay prisa, ni multitud que ahogue las conversaciones.

En Art Madrid, las galerías, los artistas y los coleccionistas tienen tiempo para encontrarse, para desentrañar las historias detrás de las obras. Un lugar donde la cercanía del diálogo toma protagonismo frente a la grandilocuencia de los números. A lo largo de estos veinte años, hemos visto crecer a galerías que comenzaron esta aventura con nosotros, que han compartido y forjado su camino en ese mismo espíritu de cercanía y autenticidad. Al mismo tiempo, cada edición se enriquece con la incorporación de nuevos proyectos y visiones que inyectan aire fresco y amplían nuestras perspectivas artísticas.


Veljko Vuckovic. Suspended State. Óleo sobre lienzo. 2024.


El 2025 nos trae una selección de artistas que están dibujando el futuro del arte. De la mano de las treinta y cuatro galerías que participan en esta edición de Art Madrid, descubriremos a artistas cuya pasión por la expresión visual redefine los límites entre la abstracción y la figuración; propuestas audaces que exploran la textura, el color y el simbolismo de “otras” narrativas visuales; nuevas voces y miradas que se enfrentan a los desafíos de la creación en un mundo globalizado. Esta riqueza de perspectivas permite que los visitantes asistan a un diálogo constante entre la creación contemporánea y las tensiones que la atraviesan.

Un ejemplo claro de cómo los artistas contemporáneos están tejiendo hilos entre el pasado y el presente, reconfigurando así, nuestra comprensión del arte como una práctica dinámica y en constante diálogo con la historia. En este contexto los artistas desafían las convenciones del lenguaje visual y nos invitan a repensar los significados, las texturas y los símbolos que impregnan nuestras percepciones.

La feria ha sabido mantenerse fiel a su identidad de ser un evento cercano, de dimensiones contenidas pero de gran impacto, que le ha permitido ofrecer una experiencia única y personalizada a todos los involucrados. La pregunta que planteamos es clara: ¿cómo se entiende el arte contemporáneo en el siglo XXI? ¿Cómo puede una feria no solo ser un lugar de compra-venta, sino también un espacio de debate, de crítica, de descubrimiento? Y, sobre todo, ¿qué significa celebrar veinte años de arte contemporáneo en un mundo que se transforma a una velocidad vertiginosa?


Iyán Castaño. Corrientes circulares. Técnica mixta. 2024.


En este 2025, Art Madrid se presenta como un llamado a la acción: a detenernos y reflexionar sobre el papel que el arte juega en nuestras vidas y en la sociedad. En lugar de ser una respuesta rápida a la dinámica del mercado, la feria ofrece una pausa, un espacio de reflexión en el que la obra de arte puede dialogar con el espectador de manera más profunda y significativa. Este enfoque no solo es necesario, sino que se convierte en un acto de resistencia frente a la inmediatez y la superficialidad que a menudo caracteriza al consumo de arte en la era digital.

En una época en la que la aceleración del mercado y las tendencias consumistas definen la creación y la exposición de las obras, Art Madrid ha mantenido su fidelidad a un modelo que apuesta por la reflexión pausada, el encuentro personal y el diálogo profundo. Esta crítica a la aceleración es particularmente pertinente en un momento histórico en el que las plataformas digitales, los algoritmos y la globalización están redefiniendo nuestras interacciones con la cultura.


Joana Gancho. ST. Óleo sobre tela. 2024.


En esta edición nos enfrentamos al reto de equilibrar la necesidad de ser relevante en un mercado globalizado con la preservación de la autenticidad y la creatividad. En este sentido, hemos logrado encontrar un punto intermedio, donde la calidad de la propuesta artística se prioriza por encima de la masificación de los eventos. Este principio es fundamental para entender cómo la feria ha logrado, durante dos décadas, convertirse en un escaparate internacional que no pierde de vista su esencia local y su conexión con la comunidad artística de Madrid.

La presencia de disciplinas como la pintura, la escultura, la fotografía y la videocreación evidencia la pluralidad de enfoques que define a Art Madrid. La diversidad de lenguajes artísticos ofrece al público una visión completa y diversificada del panorama del arte contemporáneo actual, poniendo de manifiesto el poder del arte para transformar la percepción de los espacios urbanos, integrando la tecnología en el proceso creativo para reconfigurar la relación entre el espectador, el arte y el contexto que lo acoge.

Richard García. Me peleo con las bestias de mi propia fantasía. Acrílico, tintas, spray y rotulador sobre tabla. 2024.

Art Madrid regresa en esta edición celebrando sus veinte años de arte contemporáneo; comprometida con su causa de seguir siendo espacio abierto para galerías y artistas que buscan diferenciarse en un mundo cada vez más fragmentado y saturado de imágenes. Por eso procuramos que las propuestas expositivas de las galerías resuenen en el público y nos ocupamos de apoyar esta experiencia proponiendo otras formas de relacionarse con el arte contemporáneo, abordando cuestiones complejas como el cambio climático, la identidad, la memoria colectiva y la política global. Este 2025, las obras que se presentarán en Art Madrid reflejarán, sin duda, las inquietudes y preocupaciones más urgentes de nuestro tiempo.