Rocío Verdejo

Crashroom, 2014

Impresión con tintas pigmentadas sobre papel Hahnemühle sobre dibond

70 x 50 cm

sobre Rocío Verdejo

Granada, 1982

Rocío Verdejo estudió Comunicación Audiovisual en la Universidad de Málaga y un máster de Fotografía en la escuela EFTI de Madrid especializándose en moda y creación artística. Una detallada planificación de la escena le permite trabajar forma y contenido simultáneamente, estableciendo relaciones de sentido entre lo real y lo imaginario a través de un plano simbólico que multiplica las capas de sentido. Construye imágenes partiendo de un guión mezcla de anotaciones, dibujos y tomas de trabajo de localizaciones y modelos. Una realidad dramatizada cercana a la óptica del cine con una profundidad de elementos que permiten al espectador adentrarse en esos espacios llenos de símbolos e irónicos guiños dotando de nuevo significado a sus cuidadas composiciones. Verdejo ha participado en varias exposiciones individuales y colectivas en ciudades como Barcelona, Málaga, Madrid o París. Además de Festivales como Pa-ta-ta 2013 donde obtuvo el premio del Festival o Incubarte 2012. En el 2018 recibe el Premio Arte a un click por su serie Crashroom.

sobre sus obras

La fotografía de Rocío Verdejo se puede enmarcar dentro de la fotografía escenificada contemporánea y destaca por sus cuidadas composiciones mostrando una realidad muy cercana a la óptica del cine llena de símbolos y referencias que interpelan al espectador con unos juegos de luces muy sutiles. Sus fotografías narrativas nos invitan a reflexionar sobre cuestiones de gran carga emocional con una estética sofisticada muy vinculada al universo de la moda y personajes habitualmente femeninos. Su última serie Alegoría de la memoria nace de su proyecto más personal llamado La construcción de mi memoria en el que Verdejo, ante la ausencia de recuerdos entre los 0 y los 18 años, reflexiona sobre los temas más impactantes de ese periodo de los que le gustaría tener algún recuerdo. A raíz de este sorprendente proyecto surge Alegoría de la memoria, en el que la artista indaga en la memoria pero sin esa parte autorreferencial anterior. Para Verdejo la memoria es una mujer ancestral conectada con la naturaleza, que como si de una criatura fantástica de la mitología se tratara, habita en su morada recibiendo las experiencias que transformará en recuerdos.